miércoles, 11 de enero de 2012

Abriendo tu propio camino

08/01/2012

Llego el momento,
se presentó la oportunidad,
y diste el siguiente paso.
Te daba igual,
coordinador jefe,
que pastor,
que barrendero municipal,
al fin y al cabo,
solo son trabajos.
Y ahora vuelves,
a donde perteneces.
Vuelves al Bierzo.
Apúntate este movimiento,
entre los aciertos.
Principio de un sueño,
que se empieza a cumplir,
inicio de la vida anhelada.
Pero ya sabes primo,
no lo habremos dicho veces,
hay que hacer,
lo que hay que hacer,
y hay que hacerlo con nuestras manos,
es el aire que respiramos,
y hay que hacerlo abriendo tu propio camino,
caminante de una sendero,
nunca antes transitado.
Ya sabes maestro,
igualito que la gota:
¡¡¡ La cumbre !!!
¡¡¡ La ladera !!!
¡¡¡ El llano !!!
Hasta llegar al mar.

Ya sabes primo,
como la gota,
que poco a poco,
gota a gota,
cambia el curso de los ríos,
y esculpe las piedras,
para que sean de esta,
y no de otra forma,
siempre abriendo su propio camino.

Ya sabes primo,
como la gota que elige,
el camino más recto
y atraviesa el ojo de mar,
para alimentarse de la inmensidad.
Pero que te voy a contar,
tú ya sabes como se hacen las cosas,
avanzando campo a través,
dejando que el agua de las plantas,
empape tu ropa
y moje tu piel,
porque como a la gota,
poco a poco,
gota a gota,
nos queda mucho por ver,
nos queda mucho por aprender.

Ya sabes primo,
abriendo tu propio camino,
poco a poco,
gota a gota,
nota a nota,
elige tu propio destino.


                                                       A Pedro Monasterio, musico, loco y amigo.