Ajuste de cuentas

10/11/2007


Hay gente que se muere
y gente que no,
nosotros por suerte
hoy estamos vivos,
para escribir estos versos urgentes,
versos estrictamente necesarios
para el futuro de nuestro presente.

Un aplauso para los valientes,
para el inconformismo de la gente,
para los que madrugan a diario,
para el nocturno decadente,
todos gente decente.

Solo son héroes o villanos
el tirano y el obediente.
Tu enemigo y tu hermano
del mismo árbol descienden,
castigo del fruto del manzano.
En manos de un dios omnipresente,
el que nos retiro la mano
en el rodar por la pendiente
y nos vendió como pienso para gusanos.

Si te amenazan enseña los dientes,
que sean otros los maltratados.
Tu alza la frente,
no dejes que te hagan mas daño,
que ponga el la otra mejilla,
el que nunca puso ninguna
y nos dejo olvidados.
No rezare a la hipocresía
de los hombres santificados,
ni a Jesús, ni a Cristo, ni a Maria,
ni al ultimo beatificado.
Deje de creer en tonterías
y en cuentos inventados,
hace ya muchos años.

¿Donde están las teorías,
de la ciencia y la razón?

Ahora que es pecado,
no pedir a su dios perdón,
por lo mal que te has portado.
Solo hay una solución,
no creer en ningún dios.
Por que si existen,
valientes hijos de puta.
Vaya mierda de padre,
el que no libra de todo mal
a la sangre de su sangre.
Bajo la escusa de así aprenderá,
así se hará un hombre,
todos los días nos quieren joder,
para aprender sufrirá,
con su rifle,
en la guerra,
cada día,
¿Cuantos niños matara?
Sádico y cabrón.

Luego se nos vende
con un discurso sobre el amor,
y nosotros inocentes
aprendemos del dolor.

Que sabio fue Edipo,
en su carnal traición.
Un padre asesinado por su hijo,
en la lucha contra la opresión.
Mañana mataremos a Dios.